Buscar la fuente original

En investigación, lo primero que te enseñan es que, de lo que lees, siempre vayas a buscar la fuente original. Es decir, que no vale un “el autor B dice que el autor A habla de …”. Vamos a buscar qué dice el autor A y no nos quedemos en la capa/interpretación que hace el autor B.

Pues bien, cuando diseñamos deberíamos aplicar la misma norma. Si queremos comunicar un concepto, tenemos que buscar que la formalización remita a lo que queremos explicar y de la manera que lo queremos explicar, sin imitaciones, sin simulaciones. Cuanto más nos acerquemos a la imagen que queremos plasmar, más fidedigno será el mensaje. Y esto lo conseguiremos, siguiendo con el paralelismo a la investigación, yendo directo a la fuente original, a la cita del autor A.

Si os habéis perdido, lo explico con ejemplos:

Posters de Rock – Vudumedia

Si en la cubierta de un libro que habla de carteles de música rock –en este caso Gay Mercader 1971/2017 Tour Posters– queremos mostrar el efecto de los pósteres en una pared, encolados, generemos estos carteles, los encolamos y los fotografiamos.

Karramarro (Vudumedia) podría haber escaneado los carteles, recortarlos digitalmente y aplicar unas sombras paralelas en Photoshop. Pero no, descartó las simulaciones para dar fiabilidad a la imagen. Se acercó al máximo a la realidad (al “autor A”). Carteles encolados = carteles encolados.

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Calco gigante – La Fonda Gràfica

Si lo que queremos es hablar de una pieza como una rueda de molino, para reflejar el pasado molinero de una villa (Regencós, Catalunya), para diseñar la cubierta de un libro que habla de este pueblo, vamos a buscar la rueda de molino (el autor A, en este caso).

L’Oriol Piferrer (La Fonda Gràfica) decidió que la imagen la crearía a partir del calco de la gran pieza, original, descartando fotografiarla o dibujarla. Para afrontar el reto que él mismo se había puesto, se documentó con vídeos de gente que calca tumbas (rubbing grave stone) y en el Chinese art Rubbing, que le hizo descubrir el grafito en polvo.

Un calco muy grande para un pueblo muy pequeño. Una aproximación directa al concepto a comunicar.

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Piezas de reloj – Lo Siento

Lo Siento participó en el proyecto “ensaïmadart” para conmemorar el 50 aniversario de la Fundació Amadip.esment, donde se invitaba a diferentes profesionales del diseño a intervenir en la caja de la ensaimada, típica de Mallorca.

Siguiendo su estilo minucioso de trabajar con el corte del papel, el estudio de Barcelona creó el mecanismo de un reloj, pieza a pieza, que luego fotografió e imprimió en la caja de ensaimada. De nuevo, tal vez (¡seguro!) habría sido más rápido simular y superponer las piezas digitalmente, pero el autor A explica mucho mejor lo que piensa que cualquier otro autor (B, C, D …).

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Aunque al final la imagen que hemos creado sea una ilustración o una fotografía, más o menos realista, o simbólica (según la intención que haya detrás), si la hemos creado a partir del origen, estaremos más cerca de la verosimilitud y huiremos de la simulación.